
A la hora de someterse a una cirugía estética hay que valorar diversos aspectos: la propia operación en sí, el resultado que se espera y también cuánto se tarda en recuperar una desde que sale del quirófano. Hoy queremos hablarte de cómo es una reducción de pecho antes y después.
Las mujeres que se someten a esta intervención suelen sufrir lo que se conoce como hipertrofia mamaria o gigantomastia: una alteración mamaria por la que los pechos son de gran tamaño, mucho más del que les correspondería por la constitución.
En qué consiste la operación
La reducción mamaria supone disminuir volumen y alterar la forma del pecho a través de la eliminación del exceso de piel, grasa y glándula mamaria. De esta manera se consigue un pecho más firme y acorde a la estructura física y gusto de la paciente.
La apariencia con una reducción de pecho antes y después es evidente, aunque los resultados finales no se apreciarán hasta pasado un año. En los meses posteriores a la operación estará hinchado, algo normal y que se va corrigiendo poco a poco.
El Doctor Díaz Gutiérrez, cirujano en Madrid, explica a las pacientes en su primera consulta que la intervención dura entre tres y cinco horas y el postoperatorio varios días, en los que se han de seguir una serie de pautas. Tendrá ligeras molestias, para las que se recetarán analgésicos.
Tras la operación la paciente ha de pasar una noche en el hospital con el fin de asegurarnos que todo evoluciona de manera correcta. Al recibir el alta al día siguiente se le dan las indicaciones que deberá seguir durante los próximos días.
Vida tranquila en casa
En las primeras cuatro jornadas precisará hacer un reposo relativo, evitando mover los brazos y haciendo vida tranquila en casa. La zona operada no puede mojarse ni dormir boca abajo, lo mejor es hacerlo sobre un cabecero elevado.
Tras estos días deberá acudir a revisión, para hacer una cura y chequear la intervención. A partir de ahí, y siempre siguiente las indicaciones que le haya dado el Doctor Díaz Gutiérrez, se incorporará a su vida normal, aunque con calma. A la semana de la operación puede volver al trabajo, aunque si éste requiere esfuerzos físicos se recomienda esperar entre dos y tres semanas.
En el primer mes ha de seguir unas pequeños cuidados, como hacer las curas que le hayan indicado, continuar durmiendo boca arriba y usar sujetador deportivo sin aros -también para dormir. Durante este tiempo tampoco se puede masajear el pecho ni realizar actividades deportivas.