
El seroma es una posible complicación en intervenciones quirúrgicas como la mamoplastia de aumento. Cuando surgen se forman acumulaciones de líquido seroso, compuesto de grasa, linfa y suero que en estos casos suele concentrarse alrededor de la herida producida por la incisión. Suelen aparecer en estadios tempranos, entre los siete y diez días tras la operación. Sin embargo, también puede darse el seroma tardío en mamas con implantes a partir de los tres meses tras el aumento.
Principales causas de la aparición de seromas
En algunos casos, se pueden producir daños de tejidos, vasos sanguíneos o vasos linfáticos de donde procede el líquido que va a rodear la herida. Además, se producirá un aumento de leucocitos que no pueden ser absorbidos y provocan la aparición del seroma.
Esta complicación es más frecuente durante la implantación de prótesis mamarias tras una mastectomía. Precisamente, en esta cirugía se van a extirpar gran cantidad de ganglios linfáticos que son los encargados de absorber el líquido que se acumula en la zona.
¿Conoces los síntomas de un seroma?
- Hinchazón en la zona de la cicatriz.
- Puede presentar dolor en la zona intervenida.
- En los casos más severos puede dar lugar a fiebre.
La mejor forma de prevenir la aparición del seroma es ponerse en manos de un cirujano plástico experto que se encargue, durante la intervención quirúrgica, de cerrar las zonas disecadas por dentro y evitar las grandes cavidades que puedan dar alojamiento al seroma.
Hablamos de una complicación muy poco frecuente. En la mayoría de los casos se trata de seromas pequeños que son reabsorbidos por el organismo. Sin embargo, es importante realizar consultas postoperatorias para analizar la evolución de la cicatriz y su detección precoz en caso de aparecer.
El paciente siempre debe estar alerta y si detecta los síntomas que alertan sobre un posible seroma, debe acudir de urgencia a ver a su cirujano para que pueda aplicar un drenaje en la zona intervenida y reducir los líquidos acumulados.
El Doctor Díaz Gutiérrez, cirujano plástico en Madrid, siempre recomienda a las pacientes de mamoplastia de aumento que eviten la actividad física unos días tras la intervención. Rara vez es necesaria una segunda intervención para eliminar el seroma.