
¿Cuál es el proceso de recuperación después de una rinoseptoplastia? Si en otro post hablábamos del limado de caballete, en este queremos centrarnos en esta otra intervención, a la que preceden motivos algo diferentes. Teniendo en cuenta que estamos hablando de una de las operaciones de estética más demandadas hoy día, hemos creído conveniente dedicar un post en exclusiva al tema del postoperatorio.
Detrás de una rinoseptoplastia puede haber fines estéticos o funcionales. Existen distintas alternativas para remodelar el perfil y, entre ellas, destaca la operación de nariz o rinoplastia. Una de las operaciones más frecuentes en las clínicas estéticas y cuya finalidad es mejorar la estética de la nariz y aportar mayor seguridad y confianza a los pacientes que quieren cambiar en cierto modo la estructura de su rostro. Esta alternativa de intervención destaca por su rápida recuperación y por sus resultados definitivos.
Como decimos, no todas las operaciones de nariz buscan mejorar la estética o remodelar el perfil del rostro. Algunas se acometen por una cuestión de funcionalidad como por ejemplo la septoplastia. Es una intervención enfocada exclusivamente a mejorar la respiración cuando se tiene el tabique desviado, deformado o con algún tipo de bloqueo en la vías respiratorias. Esto en cuanto a la septoplastia. En cambio, lo que se hace con la rinoseptoplastia es aunar la estética con la funcionalidad. Con este tratamiento, el Doctor Díaz Gutiérrez, cirujano plástico en Madrid, modifica el hueso y el cartílago que está debajo del hueso para cambiar estéticamente la nariz y mejorar la respiración del paciente. Dicho de otro modo, con la rinoseptoplastia se logra reparar el tabique nasal deformado, torcido o inclinado que esté bloqueando la vía respiratoria en la nariz. Al mismo tiempo, se mejora la estética de la nariz.
Recuperación tras una rinoseptoplastia
Durante las primeras 24 horas, hay que permanecer en absoluto reposo y con la cabeza elevada. Para calmar el dolor, prescibiremos analgésicos y antiinflamatorios.
Hay que evitar sonarse la nariz durante esos primeros días e inclinar la cabeza por debajo de la altura del corazón. Los moratones y la mayor parte de la inflamación tenderán a desaparecer durante las 2 o 3 primeras semanas. Los apósitos, férulas y suturas se retirarán, como mucho, pasadas tres semanas.